Chapter Text
Aún recuerdo aquel día, como si hubiera sido ayer, sus manos temblorosas, su sonrisa triste y sus lágrimas callendo, fue la única en verme aquel día, aún recuerdo a su madre abrazándola una vez que entre al autobús y este me llevo al aeropuerto, si tan solo el maldito contrato hubiera durado dos o tres meses más, pero no, tuvo que vencer al acabar la escuela.
Ni siquiera puedo culpar a papá por esto, el tampoco sabía que los papeles del edificio no estaban en orden y tuvieron que demolerlo por eso, y la noticia no solo me afectó a mi, supongo que la parte que más me duele no es el haberme despedido, si no de haberle roto el corazón, de todas las personas que conozco ella era la que menos lo merecía, aún así, ella merece a alguien mejor.
El puto calor siempre me da jaquecas a estas horas, es curioso, nunca pensé que el calor de verdad te afectará bastante en la vida real, pero bueno, todo por servir a mi patriótico pueblo, tonterías, eso sería un buen material para muchos foros conocidos, o eso diría si aún hiciera shitposting, desde el entrenamiento no he estado muy activo en 4 chan por culpa de esta guerra, en verdad que lo extraño.
Especialmente extraño insultar la jodida y asquerosa raza Trigga.
Lentamente me abro camino entre mis compañeros y me posicionó en el frente, hay muchas personas y familias que cruzan está carretera cada maldito rato, hoy nos tocó revisar que algunos idiotas no se pasen de listos e intenten bombardear este lugar, solo somos doce y no tenemos más que un jodido humvee con una .50 y algunos lanza granadas.
Me sorprende que confiaran en mi para portar uno en mi M16 pero, lo que sea, no es que me quejé, mi oficial al mando, Rubén, está revisando los laterales mientras mis compañeros, Barry y Eddie vigilan el medio, los demás como yo solo nos limitamos a hacer acto de presencia para parecer intimidantes.
–...Camión cisterna, a treinta metros–uno de los tipos al frente nos avisa.
–Barry, quédate en la torreta y vigila a los pasantes, Anon y Eddie, Conmigo–con un dejo de cansancio lo sigo mientras los demás se acercan para inspeccionar el vehículo.
–¡Oye que haces!–miro al frente y veo al idiota de Danny apuntando su pistola a una familia de estegos, el niño y la madre están aterrados pero el padre parece sereno–¡No puedes acercarte al blindado! ¡Alejate!.
–Calma Danny, solo mantén tu posición–el sargento Wallace se hacerca a la familia mientras trata de tranquilizarlos, se hacerca al pequeño y lo ve con cuidado.
–...hola pequeño–el niño solo se esconde tras su madre–no tengas miedo ¿Si? Ya verás como todo esto pasa–se arrodilla en una pierna para estar a su altura.
Justo en ese momento el camión llega y, para mí sorpresa, son demasiado cooperativos, se bajan rápidamente mientras los demás ya inspeccionan la parte interior, por mi parte solo me limito a mirar hacia atras para distraerme, la carretera esta diseñada para dos carriles y la gente pasa por aquí para huir de los talibanes ¿Cuántos kilómetros tenía? ¿Ocho? Cómo sea,
–¡El niño está asustado, ya déjalo!–Barry gira la torreta hacia el otro lado
Sin otra cosa mejor que hacer dirijo mi mirada a la carretera, lo mismo de siempre; montones de personas regados por todos lados, puedo ver incluso como hasta los más ancianos deciden caminar solos… espera, centro mi mirada en la mujer que está cojeando.
Algo no me gusta, rápidamente miro a mi alrededor, siento como mis pelos de ponen de punta mientras reviso a todos en la carretera, ahí algo en esa mujer que me inquieta, pero ¿Porque? Solo es una anciana… una anciana que camina sola… cuando todos llevan incluso un niño… lentamente compruebo si mi arma tiene seguro, no lo tiene, miro otra vez a la mujer, puede que solo sea paranoico, ¿Lleva un frasco o porque brilla…?
…
ESO NO ES UNA MUJER
*RAFAGA*
–¡Anon ¿Que ha..?!–Wallace me grita pero se detiene al ver el cadáver, la gente grita mientras el viento revela que la "anciana" era un talibán con una ametralladora ligera.
Mierda
–¡¡Embosca…!!
*DISPAROS*
*RAFAGA*
No pude terminar de gritar cuando Danny es atravesado por varias balas y cae al suelo, inmediatamente corro detrás del humvee mientras mis compañeros hacen lo mismo con el camión cisterna y el blindado, mierda ¡Mierda!, Escucho el inconfundible sonido de la m2 disparando hacia… ¡No lo sé! ¡Mierda!
–¡Ahí, en la colina!–carajo eso está a 200 metros, un ruido horrible se oye de pronto.
–¡Aaahhhh! ¡Me dieeron!–es Wallace, puedo ver cómo trata de esconderse entre los cadáveres de la gente …¡Son varios! Oh infelices.
–¡Barry! ¡Dónde verga están!–puedo escuchar las balas silbando a mi alrededor.
–¡En la colina de enmedio!–comienza a vaciar la m2 mientras suelta más maldiciones, miro a mi lado y veo que Nate recarga su SAW, vuelvo a ver a Wallace, tanto él como el cadáver de Danny empiezan a recibir más balas.
–¡Ahg! ¡Mierda! *Impacto* ¡AAHHHGGG!– sus gritos son horribles… yo …
–¡Rubén!–mi oficial está del otro lado, espero que me entienda ¡No puedo dejarlo ahi!–¡Cubranme, voy por Wallace!
–¿¡Estás loco!? ¡Te van a matar!–Ruben comienza a disparar, de pronto un silbido pasa por mi cabeza antes de que algo explote detrás mío–¡Quédate en tu posición! *RAFAGA*
Veo a mi compañero agonizar frente a mis ojos, se arrastra lentamente antes de recibir un disparó en el pie, ahora lo tiene destrozado, aprieto mis dientes ante la impotencia y continuo disparando, rápidamente cargo una granada y apunto.
–Eddie ¿Los ves?–el está tirado en el piso disparando la SAW, rápidamente mira y me grita.
–¡Se mueve un cohete! ¡Ahí, el de la izquierda!–calculo un poco y después aprieto el gatillo…
*POP…*
*BANG*
No tengo tiempo para ver si le di, mientras recargo miro nuevamente a Wallace, el está ahí, no está inmóvil pero respira con dificultad… no hagas nada estúpido… no hagas nada estúpido… no hagas…
–Eddie, Cúbreme–me mira asustado mientras salgo corriendo dónde Wallace, al llegar varias balas pasan a mi alrededor mientras lo arrastró–¡Tranquilo viejo! ¡Te tengo!
Solo balbucea mientras lo sigo arrastrando al Humvee, un cohete explota cerca de nosotros y me hecha tierra a los ojos, puedo oír como Barry maldice por algo y deja de disparar, al abrir los ojos veo mi casco tirado a un lado.
–...¡Carajo!–grita Barry antes de volver a disparar–¡Francotirador a las doce!–espera…
–¡¿Que?!–volteo a verlo…
*Silbido*
*IMPACTO*
…
Mi cabeza… me duele…
Escucho algo al rededor pero todo parece estar detenido, no siento… nada de hecho, mi cabeza da vueltas y mis oídos no captan más que un zumbido molesto… yo …
¿Estoy en el piso?
.
..
…
Estoy parado en medio del auditorio, esas fotos están en todos lados, escucho las risas y burlas de mis compañeros mientras veo con horror la mirada de Fang, me está viendo con asco y repulsión, volteo al otro lado y si, tal como lo sospeché la perra morada está corriendo, eso es todo, esto es Rock Bottom de nuevo.
Pero por alguna razón ya no estoy triste, sino muy, muy enojado ¿Acaso todo lo que hice por Fang se fue a la basura por esa puta? ¿Porque todo tuvo que salir así? Mis pensamientos buscan formas horribles de matarla pero algo me detiene, miro hacia arriba y la veo, la silueta de una chica, lo único que distingo es su pelo suelto.
Es… muy bonita…
.
..
…
No puedo oír nada, o más bien, lo único que oigo son cosas moviéndose a lo lejos mientras siento como si cada músculo de mi cuerpo estuviera congelado, me duele todo ¿Dónde estoy? Una mano agarra mi párpado y lo abre mientras coloca una molesta luz en mi ojo, lo que me hace parpadear.
–...Oh …¡Oh carajo! ¡Este está vivo!–quien me hacia eso sale corriendo mientras otro más me mira con sorpresa… hey, yo lo conozco, es Will, el que trabaja en la morgue del cuartel.
No sé porque pero de pronto me siento relajado… creo que dormiré otro poco…
Meses despues
Camino lentamente por la autopista hacia Volcadera Bluffs mientras Green Day suena en mis audífonos, no tenía ganas de ir en autobús y tampoco quería malgastar dinero ahora que tengo demasiado para dos universidades públicas, tampoco quiero un aventon de algun visitante al azar, en especial con el racismo de la zona, simplemente… quería despejarme.
Veintidós años, veintidós inviernos de vida, dos décadas en las que no he hecho más que gastar oxígeno sin hacer nada productivo, se siente raro tener este tipo de pensamientos semi-suicidas a esta edad, estoy en la juventud plena para la gente adulta, y no se que hacer ahora, he pasado los últimos cuatro meses en un hospital militar cerca de Rock Bottom esperando a… no lo sé, simplemente no se que hacer, no es de extrañar.
Después de todo, fui asesinado a los veintiún años.
Recuerdo muy poco del tiempo que pasé en el desierto, pero claramente recuerdo ese día, resulta que el francotirador me dio un disparo justo en la cabeza, cuando desperté en la morgue todos mis compañeros comenzaron a, literalmente, lloriquear de alegría, en especial Wallace, al pobre le tuvieron que amputar las piernas por todas las balas que lo impactaron.
Fue horrible escuchar eso, fue un buen compañero mientras combatía con el, luego de eso me hicieron una cirugía y varios análisis para ver qué tan grave era el daño, según los forenses la bala "rebotó" en mi cabeza dejándome inconsciente, el impacto fue tan fuerte que termino dañando mi cabeza y cerebro, durante varias semanas tenía temblores en las manos debido a esto, pero eso no fue lo peor.
Me diagnosticaron amnesia.
Claro, es temporal y todo eso, pero no hace que me sienta menos jodido de lo que ya estoy, la primera vez no me di cuenta hasta que quise recordar el nombre de mis padres y porque no me agradaban, la respuesta del doctor fue mi diagnóstico, cuando me dijeron que iba a volver y que podía elegir donde no lo dude y escogí Volcadera Bluffs.
Tengo recuerdos tan hermosos como los de Rock Bottom sobre este lugar, recuerdo a una chica que me llamaba la atención y que tenía buena forma, recuerdo a unos cuantos amigos y una parasaurio color durazno siendo amigable, y eso me molesta, no recuerdo ningún puto detalle de aquellas personas, nombres, señales, ¡Nada!.
Y aún así, con mis padres tomando terapia para pareja y mis tíos poniéndose en contacto con nosotros, sigo pensando que venir aquí fue la mejor opción, este lugar tiene algo, no se que es pero algo me llama, me atrae hacia este lugar, un vago recuerdo de una persona a la que realmente le importe desde ese día en que… no sé quién, volvió a doxxearme en la escuela.
Supongo que la peor parte de mis lagunas mentales es que en cualquier momento podría recordar todo con la posibilidad de tener que ir a urgencias, o eso fue lo que entendí que pasaría, después de todo nunca me gustó la medicina así qu e no es como que me importe.
Llevo cuatro horas caminando y lo único que encuentro es una vieja gasolinera a las afueras, aun así no puedo evitar que un pequeño antojo aparezca de repente, camino hacia la puerta mientras veo una familia de micro raptors estacionarse enfrente, puedo notar como el padre me mira fijamente antes de decirle algo a su esposa, ahh, como te extrañe, racismo hacia mi persona.
Sin más rodeos entro en la tienda, un ankylosaurio morado está en la caja mientras un raptor verde acomoda varias cosas en un estante, nuevamente me mira con asco mientras finge comenzar a barrer.
–Buenas tardes–digo cuando paso junto a ambos.
–Buenas tardes–la ankylosaurio es la única en responder, pero incluso veo que es forzado.
paso de largo directo a la seccion de bebidas, tomo una lata de jugo de manzana y después agarro una bolsa de papas, en efecto, hay tanto aire adentro de ella que podría usarla para defenderme de un accidente, debería anotar eso, los viejos hábitos nunca mueren.
Cuando voy al otro pasillo el microraptor de antes pasa juntó a mí y gruñe, el raptor verde me mira fijamente mientras aprieta los dientes, ¿Que tal una barra de chocolate? Hace mucho que no como uno decente, mi mano va a agarrar uno cuando alguien me habla.
–Disculpe ¿Podría ayudarme con eso?–volteo a ver a una señorita con un suéter gris y jeans azules, veo que señala un paquete de galletas así que se lo bajo.
–Gracias–me responde mientras le doy la caja… y se queda mirándome con sorpresa, ¿Que le pasa?... Espera un segundo..
Sus ojos se me hacen familiares
–¿Ya terminaste?–el mismo raptor se me queda mirando mientras sostiene la escoba, da unos golpecitos en mi pie como insinuando que estoy estorbando.
Me limito a mirarlo con indiferencia, luego volteo con la señorita y le hago un gesto de despedida mientras tomo mis chocolates, un utahraptor encapuchado entra a la tienda cuando me dirijo de nuevo a los snacks, supongo que otra bolsa no está de más.
*Click-Clack*
…
Oh mierda.
–¡No se muevan, hijos de perra!–Las mujeres de la tienda dan un pequeño grito mientras les apunta con una Beretta–¡Todo lo que tengan! ¡Ya!.
Rápidamente todos comienzan a vaciar sus cosas mientras que yo solo levanto las manos, okey, piensa, piensa, estoy a dos metros de el…
–¡Tu, la troodon! ¡Apúrate!–...uno–¡Y tú! ¡Vacia la caja!
–¡Por favor! ¡Mi familia está afuera!–tiene la pistola apuntando a su cara–¡No me importa!... Y tú, Skinnie–...dos.
–¡Tu billetera! ¡Ahora!–...TRES.
Cómo puedo agarro la pistola con la mano izquierda y coloco mi dedo en el martillo, justo cuando el tipo intenta disparar levanto el arma y lo agarro del cuello mientras lo empujó a un estante.
Mientras forcejea lo golpeó en el estómago con la rodilla antes de quitarle el arma y aplicarle una llave para la cabeza, rápidamente paso la pistola a la mano derecha y cambio de brazo para apretarlo y que esté de espaldas a mi.
Y le apunto a la cabeza mientras lo aprieto.
–Escucha bien infeliz–digo con voz gruesa en su oido–acabo de salir de Oriente y he matado a tipos tan idiotas como tú–amartillo el arma y la presionó en su cabeza–¿Que sería uno más?.
–¡Llamen a la policía! ¡Ahora!–intenta zafarse pero lo agarro más fuerte, todos me miran con miedo antes de que la ankylosaurio corra hacia el teléfono y marque.
–P-por favor amigo, r-relájate–puedo escuchar su tartamudeo y ganas de llorar, no es como si hubiera sabido que esto pasaría, comienza a respirar cada vez más lentamente hasta que…
*Ruido sordo*
…
Lo deje caer… está inconsciente.
Siento como mis manos tiemblan mientras miro su cuerpo tirado, aún respira, instintivamente le apunto con el arma, abro la recamara para verificar que hay munición y vuelvo a apuntarle.
…
Estoy temblando… y respiro fuertemente.
Cuando la adrenalina abandona mi cuerpo me seco el sudor de la cara mientras me sostengo de un estante, viendo al tipo más de cerca me doy cuenta de algo, no lo ahogue… lo golpee con la pistola…
–...¿E-esta bien?–las personas adentro de la tienda me miran con más calma, el raptor se acerca a mi con cuidado–t-tranquilo señor–
Cuando está lo suficientemente cerca volteo el arma y se la entregó, al principio duda en tomarla pero poco después la agarra, aún respiro pesado mientras a lo lejos escucho las sirenas policiales.
…
–¿Entonces el humano de allá lo interceptó?–un oficial estego color lila pregunta al micro raptor y a los demás clientes.
–E-exacto, si–me mira de reojo–le aplicó una llave y luego lo golpeó con el arma.
Escucho la conversación a lo lejos mientras fumo un cigarro, un día… un día en esta ciudad y ya me ví envuelto en un robo a mano armada, lo peor es que ni siquiera lo sentí, ¿Cuánto duró? ¿Diez segundos antes de que lo dejara inconsciente? La idea de que estuve a punto de apretar el gatillo me perturba, juro que,, pude sentir como iba a morir si no hacia algo, maldito Trastorno de Estrés Postraumático, tendré que buscar un buen psicólogo en esta ciudad.
–¿Disculpe joven–el mismo policía en la escena me llama–Usted fue el que detuvo a ese asaltante ¿Cómo sabía desarmar a un hombre? Si no es molestia.
Por alguna razón recuerdo tenerle repulsión a los policías de esta ciudad, pero en lugar de mirarlo con odio saco mis placas de mi cuello y mi identificación, ambas de los marines.
–Ya veo…–comienza a anotar algo, volteo a ver cómo se llevan al tipo mientras otro policía hace más preguntas–Ex marine ¿Eh? ¿Que te hace venir a Volcadera?
–...No lo sé–me mira con una ceja levantada–recuerdo haber terminado la secundaria aquí eso es todo–ahora me ve como sospechoso–... Oh, vera, sufro amnesia, fue durante mi servicio.
–*silbido* vaya mala suerte–ni lo menciones–bueno, las cámaras muestran que tuviste control de la situación hasta que llegamos, solo una pregunta ¿Porque actuaste así luego de haberlo desarmado?
–...TEPT–no lo miro a los ojos–me dijeron que podia encontrar a alguien para ayudarme con eso–por lo que se, hay buenos psicólogos en esta ciudad.
–bueno, eso sería todo, ya puede retirarse, bienvenido a Volcadera Bluffs supongo–se aleja antes de detenerse y darse la vuelta–ah, y otra cosa…
–Gracias por tu servicio–...
–...No hay de que– le doy una ligera sonrisa.
Estoy a punto de marcharme con mis cosas, afortunadamente los cajeros de este lugar me regalaron lo que iba a comprar además de una lata de sardinas, supongo que estaban avergonzados por insultarme sin saber que era soldado, como sea, hora de ir a la ciudad.
–¡Oye, Espera!–esa voz…
–¿Se le ofrece algo?–pregunto mientras volteo a ver a la joven en cuestión, es la misma a la que le di las galletas.
–S-solo quería agradecerte por detener al ladron–me mira fijamente con sus ojos amarillos.
–Solo hice lo que tenía que hacer, no es gran cosa–
–Aun asi–me sigue mirando de forma rara–fue bueno que estuvieras ahí en ese momento, y-yo me puse ansiosa y no reaccionaba, en verdad, muchas gracias por ayudarnos–esa mirada …
–no hay de qué–...–¿Te conozco de algún lado?–pregunto poniendo fin al silencio incomodo–es que… me suenas familiar–Sus ojos se iluminan de pronto y sonríe lentamente.
–Oh, verás, mi nombre es…–
*Ring Ring*
Su teléfono suena interrumpiendo, mira el teléfono con una mezcla de frustración y susto antes de volver a mirarme.
–lo siento, tengo que responder–
–claro, entonces … adiós–no quisiera ser grosero, pero quiero llegar rápido para recoger mis cosas, la chica me ve algo triste antes de sonreírme.
–si, claro, ¡N-nos vemos!–con esto se aleja y contesta la llamada mientras comienza a hablar un idioma extranjero.
Con esto sigo mi camino…
Luego de otra hora y media finalmente pude llegar a mi destino, un departamento a las afueras de la ciudad, no es el más vistoso pero servirá temporalmente, cuando entré al ejército tuve que abandonar varias cosas, pero no podía simplemente tirarlas a la basura, así que papá se ofreció a alquilar una bodega pequeña para guardarlas durante mi estadía en el ejercito, hoy fui a revisarlas y aún están en perfecto estado… o al menos creo que así las dejé, no lo recuerdo.
Entró al edificio mientras la casera me recibe sin ganas.
–Buenas tardes, ¿Que se le ofrece?–ni siquiera me mira, solo sigue leyendo el periódico, su tono es tan robótico que se me hace gracioso, es casi igual al "No hiciste tu papeleo anoche" jeje.
–si, hola, soy el nuevo inquilino, el del número 215–digo con tono tranquilo, luego de Skin Row este era el lugar más barato.
–Oh… el skinnie–dice con indiferencia–bien jovencito, entra a…–al voltear a verme se queda sin palabras.
Cuando dije recoger mis cosas lo decía en serio, hubo un error en el sistema y tuve que comprar un boleto de avión a parte para mi equipaje, por desgracia ese fue el último y tuve que tomar un vuelo a Reef City, una hora de distancia en auto de Volcadera Bluffs, cuatro horas a pie, cuando salí del aeropuerto llevaba tantas cosas que la gente me miraba con miedo, algo así como la casera.
Mi vestimenta no ayuda: botas militares con pantalones cargo verdes, una sudadera gris oscuro y una gorra de baseball negra para ocultar mi cicatriz, gane un poco de musculatura en el ejército pero la descuide mientras estaba hospitalizado, aún así mi estatura aumentó significativamente luego de eso, definitivamente no es una presentación muy adecuada.
–ehh bueno… solo pasa…–me dice como si la fuera a asaltar.
Sin más entro con mi mochila y mis cosas, me dirijo al ascensor y subo al tercer piso, cuando salgo al pasillo busco mi habitación y meto la llave en la puerta, al abrir encuentro mi nuevo hogar; un departamento con una cocina a mano derecha, al fondo hay una habitación con un comedor y la sala de estar, a la izquierda del pasillo se encuentra la puerta al dormitorio y el baño.
Meh, pudo ser peor.
Simplemente entro y cierro la puerta, dejo mis maletas en el suelo y mi mochila en la mesa, entró al dormitorio y simplemente me tiro en la cama, aún así no me duermo al instante, mi mente se dirige una y otra vez hacia ese incidente en la gasolinera, definitivamente necesito ayuda psicológica si no quiero meterme en problemas.
De pronto recuerdo a esa chica, me sentí raro hablando con ella, como si algo me dijera que ya la había visto antes, aún así me resulta imposible saberlo con mi condición actual, el médico me dijo que podía recuperar la memoria literalmente cuando menos lo esperase, sólo tenía que entrar llegar en contacto con antiguos conocidos y ponerme al dia.
Pero mi teléfono murió y con él todos mis contactos, mañana me encargaré de repararlo o recuperar la información, además de conseguir empleo y tal vez revisar si puedo comprar un auto, el dinero que me dieron debería bastar para algunos meses pero prefiero invertirlos en algo inteligente, pero eso será mañana, hoy solo quiero descansar.
